Cerca del final del año, es hora de limpiar su red de barbacoa y disfrutar de su barbacoa al aire libre. Debe asegurarse de hornear su bistec, verduras y mariscos de la manera más saludable para evitar el riesgo de cáncer.
La barbacoa no es la causa del cáncer. Pero debido a la alta temperatura de la carne y las verduras asadas, los carcinógenos químicos se producen fuera de los alimentos.
La alta temperatura (350 grados o más) provocada por la barbacoa, el horneado e incluso la fritura hace que los aminoácidos de la carne reaccionen con la creatinina y formen aminas heterocíclicas o HCA. Los estudios han demostrado que estas sustancias conducen a la formación de tumores.
El Instituto Nacional del Cáncer dijo que los animales de experimentación alimentados con HCA desarrollaron cáncer, pero la investigación en humanos no está clara. Sin embargo, el estudio de AARP de los Institutos Nacionales de Salud encontró que comer mucha carne roja cocinada a altas temperaturas puede aumentar el riesgo de cáncer de páncreas en los ancianos.
Sugerencia: no guardes las pinzas para hornear y el delantal. Simplemente siga estos cinco sencillos consejos de barbacoa para reducir su riesgo de cáncer:
Aplicar con adobo o especias. Simplemente marinar la carne durante 30 minutos antes de la barbacoa puede reducir la formación de HCA hasta en un 90 por ciento.
Baje el calor. Mantenga la temperatura de cocción moderada en lugar de freír y freír.
Primero asa la carne en el horno de microondas, y luego termina en la parrilla. Esto puede reducir el tiempo de exposición de la carne a altas temperaturas, lo que puede reducir el tiempo de formación de carcinógenos. La ventaja adicional es que la carne será más jugosa.
Elija carne magra para la barbacoa. La carne magra tiene menos goteo de grasa, lo que hace que el carbón se encienda, por lo que la carne asada está libre de altas temperaturas.
Retire la parte carbonizada antes de comer, y la parte quemada es la parte más cancerígena de HCA.
